Uno de los pueblos más bonitos de España, según nos relataba Azorín. Situado en la cumbre de una espectacular peña cortada, desde donde se cuelgan multitud de casas blancas y un castillo medieval árabe que conforman con otros muchos monumentos, el Conjunto Histórico-Artístico, Arcos de la Frontera constituye uno de los ejemplos más destacados del emplazamiento en altura, ya que ocupa la cumbre y la ladera de una Peña asentada a los pies del Río Guadalete con unos 195 m de altitud. Arcos es una ciudad de singular belleza, conocida internacionalmente y que merece la pena visitar despacio, sin prisas, saboreando sus callejuelas, sus empinadas cuestas o un precioso atardecer desde algunos de sus miradores.